En el rincón de mi alma, encontré un cariñet,
Pequeño y tierno, como un dulce juguete.
Sus ojos chispeantes, como estrellas brillantes,
Su risa contagiosa, llena de sueños errantes.
En sus abrazos cálidos, hallé refugio sereno,
Un lazo eterno, sincero y siempre ameno.
En siete versos, mi cariñet, quiero expresar,
Lo afortunado que soy, por tenerte en mi caminar.